04. La Tumba

Escribió Carmelo Fernández, enviado por Páez para documentar toda la repatriación de los restos de Simón Bolívar:

La urna también fue levantada y Bolívar apareció: Bolívar el Grande… El Libertador… El Genio de Colombia… Fue un momento difícil de describir, ante la emoción que embargó el ambiente, ante la expectativa de volver a revivir los momentos de gloria cuando el pueblo volcaba su atención para ver al Bolívar de carne y hueso

En su interior: el esqueleto, pocos restos de vestido y algunos accesorios que fueron colocados para contener las vísceras de Bolívar luego de la autopsia… Visto su contenido, el Sr. Gobernado preguntó en voz alta al Dr. Reverend, médico del Libertador, y a Manuel Ujueta, Jefe Político en 1830, si en aquel cadáver reconocían el del Libertador de Colombia… Acto seguido, los prenombrados se inclinaron a constatar los restos: El Dr. Révérend reconoció el cráneo que él aserró de manera horizontal durante la autopsia para inspeccionar el cerebro, al igual que las costillas que mostraban las marcas oblicuas de la sierra para examinar el pecho: los huesos de las piernas y pies estaban cubiertos con las botas de campaña, la derecha todavía entera, la izquierda despedazada y sólo conservaba su parte interior: pedazos de galón decaídos se hallaban a los lados de los muslos, y listas de color verde de cobre oxidado, formaban líneas paralelas a éstos huesos… al momento que se oyó: Sí, contestaron ambos señores con voz conmovida. El señor Ujueta tenía los ojos llenos de lágrimas.

Se agrega a la verificación de los restos, que desde el 20 de diciembre de 1830, y durante los siguientes doce años, no hubo otra sepultura en la Catedral

LA TUMBA DE BOLIVAR

 Investigación, Guión y Musicalización: Jorge Mier Hoffman

Lectura: Porfirio Torres

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Un Enigma llamado Bolívar

La Carta «que cambiará la historia» es el polémico libro sobre el asesinato de Bolívar, cuyas pruebas son tan concluyentes, que obligó al Gobierno de Venezuela iniciar una investigación sobre la muerte del Libertador

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